Es evidente que ya no podemos ignorar los efectos del cambio climático y su impacto en el trabajo de las empresas.
Según un artículo de la ONU, un escenario para nada futurista señala que en 6 años más China consumirá más del 15% mundial de energía, Estados Unidos impondrá restricciones al uso del agua y habrá una hambruna generalizada en África.
Considera que la concentración de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera, que era de 280 partes por millón (ppm) antes de la Revolución Industrial, ahora es de 380 ppm. Esto duplicó la concentración de gases invernadero, aumentando la temperatura de equilibrio en la Tierra en 3 grados Celsius.
Te invitamos a conocer cómo el cambio climático afecta a nuestro país y qué están haciendo las empresas para ayudar a mitigar sus consecuencias.
Según el Ministerio de Medioambiente, Chile es un país altamente vulnerable al cambio climático y sus efectos ya se están haciendo notar. Las proyecciones climáticas ya muestran el alza en la temperatura y la disminución en las precipitaciones.
Por esto, el 19 de junio de 2017, el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad aprobó el nuevo Plan de Acción Nacional de Cambio Climático que indica las acciones que realizarán las diversas instituciones públicas competentes en la materia.
En tanto, la Corporación Nacional Forestal, CONAF, está desarrollando una estrategia nacional para resguardar nuestra biodiversidad y enfrentar de la mejor manera el riesgo climático que vemos en diferentes áreas:
Las empresas chilenas entienden que su rentabilidad será afectada por el cambio climático, ya que pone en riesgo incluso su viabilidad. Este es el caso de las empresas agrícolas o ganaderas, a raíz de la sequía.
De acuerdo a un estudio realizado por Acción Empresa “algunos sectores productivos han empezado a internalizar los efectos del cambio climático como uno más de sus desafíos”. Entre ellos se menciona a la industria vitivinícola.
Los principales riesgos que enfrentan las empresas en nuestro país son:
Las empresas del sector privado y público ya están optando por promover prácticas medioambientalmente amigables y el desarrollo sostenible de la industria.
Entre sus medidas encontramos:
Además el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático está diseñado para fortalecer las capacidades para enfrentar el nuevo clima del planeta, profundizar en sus impactos y detectar la vulnerabilidad del país.
Sus lineamientos generales proporcionan una estructura operativa para la implementación, coordinación y coherencia de las acciones de los diferentes sectores productivos e involucra:
Adaptarse al cambio climático supone un gran desafío para el sector productivo nacional, pues implica riesgos y oportunidades.
Muchas empresas ya comenzaron a buscar el financiamiento necesario para adoptar prácticas industriales amigables con el medioambiente.
Por esto, cada empresa deberá hacer un autoevaluación para identificar su vulnerabilidad y cómo puede adaptarse a este nuevo escenario climático, que se verá agravado si no se toman acciones concretas.