El próximo sábado 7 de septiembre tendremos un nuevo cambio de horario, para dar la bienvenida a días más extensos debido al acceso a mayor cantidad de horas con luz natural.
Un ajuste que se debe hacer cuando los relojes marquen las 23:59 horas, pasando a las 01:00 horas del día siguiente, aunque en Isla de Pascua e Isla Salas y Gómez, el cambio se deberá realizar a las 22:00 hora local, alcanzando las 23:00 horas.
¿Cómo estos cambios generan efectos en las personas, en sus hábitos de sueño y las rutinas del día a día?
Paz Lorca, directora de la Escuela de Desarrollo Social y Educación IACC explicó que el cambio de horario provoca “un desajuste hormonal principalmente, ya que la luz solar influye directamente en el cerebro y esto altera a los niños provocando un poco de ansiedad”.
“La mayor cantidad de horas con luz de día, hará que les cueste un poco más regular el sueño a niños y niñas, aunque también a los adultos, que les costará un poco regular el momento de quedarse dormidos y despertar en la mañana”, agregó la docente, explicando que esto se debe a que tal como los adultos, tienen ese “reloj interno que hace que les cueste adaptarse a estos cambios que se producen cada cierto tiempo”.
Paz Lorca, entregó algunas recomendaciones para que ayudemos a los más pequeños y pequeñas de la casa a enfrentar este nuevo cambio de horario.
“Es súper importante ajustar las rutinas, y para que este cambio funcione, tiene que estar implicada toda la familia. No sacamos nada con decirles que se acuesten temprano si nosotros nos acostamos tarde”, indicó, agregando que es importante evitar “las bebidas azucaradas y dulces en general como la comida chatarra o en grandes cantidades que activan e impiden un descanso productivo”.
También recomendó “explicarlo como un proceso natural, indicarles que habrá un cambio de horario y por eso nuestro cuerpo se tiene que ir adaptando. Otra sugerencia es tratar de que los niños hagan unos 30 minutos de actividad física, así se van cansando, les costará menos quedarse dormidos y tienen más energía para el otro día, ya que liberarán endorfinas”.
“La paciencia es clave, explicar al niño lo que está pasando, aunque pregunten mil veces, es fundamental. Es bueno comentarles que esto va acompañado con las estaciones del año y para esta adaptación es bueno no hacer uso ni abuso de las pantallas, porque provoca lo contrario de lo que queremos lograr, los activa, pero no para el aprendizaje, los sobre estimula”, añadió.
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